Una rata obligó a Qatar Airways a suspender un vuelo que debía partir de Barcelona con destino Doha el jueves pasado. Sus más de 250 pasajeros tuvieron que hacer noche en un hotel del Maresme y esperar a ser recolocados en otros vuelos.
Fue una azafata la que dio el aviso sobre la presencia del roedor en el interior del aparato poco antes de que comenzara el embarque. La rata fue vista en uno de los galleys e inmediatamente se dio aviso al comandante.
Qatar Airways decidió aislar el A330 y sembrarlo de trampas para intentar capturar al roedor, pero no tuvo éxito. Finalmente el avión partió hacia Doha vacío. Repasando el historial del aparato la compañía llegó a la conclusión de que la rata se había colado a bordo en el aeropuerto de Filipinas. Allí, el personal de la aerolínea avisó de la presencia de lo que parecía una rata corriendo por los pasillos del avión pero no la encontraron.
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo