Aena ordena derrumbar el esqueleto del hotel del aeropuerto de Barajas

Aena ha explotado y ha dicho basta a su proveedor más veterano, Sampol, empresa de Mallorca adjudicataria de la construcción de un hotel frente a la terminal 2 del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas que debía haberse abierto en 2009. El gestor aeroportuario público ha demandado a la promotora en los tribunales, exigiéndole que derribe la estructura y deje el terreno en su estado original.

El esqueleto del hotel genera una mala imagen en la T2. De haber ganado el concurso Hoteles Globales igual el establecimiento ya estaba construido. Globales tiene mucha liquidez y Sampol acaba de poner en marcha un ERE en su división de España. Lo cierto es que la tensión se palpaba desde hacía años entre Aena y Sampol y por fin ha estallado.

La compañía mallorquina no tenía experiencia hotelera y por eso se asoció en su momento a Barceló, pero esta cadena abandonó el proyecto al poco de comenzar la crisis. Sampol tampoco tenía experiencia en centros sanitarios y se presentó a la construcción del polémico hospital Son Espases de las Islas Baleares.

Sampol ha contestado a la acción judicial de Aena con otra demanda, informa Vozpópuli, a quien un portavoz de la empresa ha declarado: “Si nos dan los 10 millones de euros que nos ha costado lo que tenemos levantado hasta ahora, nos vamos y se acabó. Ellos autorizaron la salida del socio hotelero, lo que ha destrozado el proyecto”. Dinamitar ahora el edificio, que tiene una altura de seis plantas y dos sótanos bajo tierra, puede costar unos tres millones de euros.

En 2007, Aena adjudicó la obra por 40 años y 90 millones de euros a una UTE formada por Sampol y Barceló, con participaciones del 81% y el 19%, respectivamente. El proyecto del hotel, ubicado frente a la T2 de Barajas, preveía 300 habitaciones, además de salas de convenciones y plazas de aparcamiento. En sede parlamentaria, las últimas declaraciones públicas del Gobierno sobre esta infraestructura apuntaban a que se buscarían “soluciones que permitan continuar con las obras”. Sin embargo, el acuerdo con Sampol ha fracasado.