La Generalitat Valenciana recela de los libios interesados por el aeropuerto de Castellón

Aunque la oferta de compra no alcanza el valor de la construcción del aeropuerto de Castellón y, además, se desconoce la identidad del fondo hispano-libio interesado en hacerse con esta instalación, en el Gobierno de la Generalitat Valenciana sostienen, de puertas a afuera, que la negociación encabezada por Aerocas (presidida por Carlos Fabra) sigue adelante y que sería beneficiosa para la Comunidad.

Sin embargo, en la Consejería de Economía que lidera Máximo Buch se han despertado serias dudas acerca de la identidad y la solvencia de los supuestos inversores extranjeros y se manifiesta a la prensa que el proceso está pendiente de “verificación”.

Además, según publica hoy El Confidencial, las negociaciones que anunció el ex presidente de la Diputación provincial y máximo responsable del aeropuerto castellonense el pasado 9 de enero tienen como interlocutor a un simple periodista de Libia cuyo papel se limitaría al de intermediario sin recursos económicos conocidos.

El digital asegura que fuentes de Trípoli han indicado que el profesional de la comunicación habría contactado con Aerocas para interesarse por la infraestructura, con la intención de encontrar luego inversores en su país. No obstante, hasta la fecha no ha hallado tales socios dispuestos a pagar 87’5 millones de euros, que es la cantidad de la oferta real, a pesar de que Carlos Fabra aseguró inicialmente que era de 200 millones.

En la Generalitat se defienden de las dudas externas apuntando que la no revelación de la identidad del fondo inversor se debe a la obligación de confidencialidad, pero recalcando que las negociaciones continúan abiertas entre Aerocas y los libios.