Los hoteleros de Mallorca, preocupados tras el ingreso en prisión del dueño de BH

Tras la detención del dueño de BH, los empresarios y hoteleros de Mallorca muestran su preocupación ante la imagen que se está dando de la zona como destino vacacional y de ocio nocturno. Las patronales turísticas de la isla consideran la detención e ingreso en prisión de Bartolomé Cursach como un "nuevo golpe" a la imagen turística.

Según recoge mallorcadiario.com el sector vive en la "sorpresa y conmoción" por la larga lista e importancia de los delitos que el juez imputa al dueño de la cadena hotelera BH y a su mano derecha Bartomeu Sbert. Según la Fiscalía, Cursach compraba a políticos y funcionarios para agilizar sus trámites y poner trabas a su competencia. Ambos se enfrentan a 17 delitos, entre ellos tráfico de drogas y crimen organizado.

Según recoge el diario Última Hora, el sumario del caso evidencia que se trata de una organización criminal jerarquizada y perfectamente organizada. Bartolomé Cursach, detenido el pasado martes junto al directivo de su empresa, no dudaba en utilizar a sus contactos en todos los cuerpos policiales para hacerse con el monopolio del negocio nocturno de la isla (Detienen al dueño de la cadena BH).

Exempleados y empresarios nocturnos de Mallorca han declarado que el empresario utilizó a varios de sus empleados como cabezas de turco para evitar que ciertas informaciones en su contra pudiesen salir a la luz.

El juez y los fiscales dan credibilidad al testimonio que sostiene que un trabajador del empresario que estaba enganchado a las drogas apareció muerto por sobredosis, pero en realidad no era más que una cabeza de turco el testigo asegura que “Cursach se lo cargó”. También apareció muerto otro empleado, que trabajaba como portero en una conocida discoteca propiedad del hotelero y que, supuestamente, custodiaba material contra él.

Los denunciantes aseguran que otro de los exempleados, cuyo fallecimiento fue “en extrañas circunstancias” tenía pruebas de que Tolo Cursach tenía material pedófilo. No se han encontrado indicios de dichas imágenes tras los registros informáticos llevados a cabo por la Policía.