Virgin Atlantic ha dado un paso más en su lucha por evitar que IAG, el consorcio de Iberia y British Airways, pueda comprar Bmi a Lufthansa. Tras reiterar públicamente su oposición al acuerdo firmado en diciembre entre IAG y la compañía alemana, Virgin ha acudido a la Comisión Europea y ha presentado una queja formal aludiendo perjuicio a la competencia, según publica Expansión.
La aerolínea de Richard Branson tiene el interés puesto en Bmi por los slots que esta maneja en el aeropuerto de Heathrow (Londres), igual que el grupo Iberia-British. Si IAG se queda con la empresa en disputa, se convertirá también en líder en el aeródromo londinense, con un 53% de los derechos de aterrizaje y despegue.
Se espera que la Comisión Europea se pronuncie sobre la operación el próximo mes de marzo. En un comunicado, Branson ha reclamado que “las autoridades de competencia británicas y europeas realicen el examen más completo posible y se aseguren de parar el acuerdo”.
Me conmueven los argumentos del sr Branson contra la compra de BMI por parte de IAG con el dinero de Iberia.
Sir Richard Branson, que se dedicó a comerciar con CDs en plan mercado negro por las aguas del Atlántico y reconocido por él mismo, es también la persona que inició Virgin Express en Bélgica y la acabó fusionando con SN Brussels para quedarse con el mercado del aeropuerto de Bruselas en exclusividad.
No se puede acusar cuando el pasado te delata.
En su favor, que es un empresario ejemplar en Aviación que no ha entrado en promociones mediocres como las de Ryanair.