“La manifestación es un pulso a los empresarios hosteleros”

Los sindicatos de hostelería de Santa Cruz de Tenerife se han echado esta tarde a la calle para protestar por el bloqueo en la negociación del convenio colectivo y demostrar su “fuerza” a una patronal a la que acusan de querer acabar con treinta años de derechos.

La manifestación, a la que han acudido 3.000 personas, según los sindicatos, y que se produce a solo tres días de que ambas partes vuelvan a reunirse, no supone, a juicio del secretario general de CHTJ-UGT, Domingo Trujillo, un impedimento para seguir negociando “aunque evidentemente la patronal se mosqueará”.

“La manifestación de hoy es un pulso a los empresarios porque ellos creen que con la crisis los trabajadores no nos van a seguir”, explica a preferente Trujillo quien afirma que “se trata de medir nuestras fuerzas” de cara a la reunión de este viernes.

Incertidumbre

La otra parte del conflicto, Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro, considera que el calendario de movilizaciones de los sindicatos puede llevar consigo “la cancelación de las vacaciones de muchos turistas, lo que agravará la difícil situación financiera que soporta el sector”.

“Este tipo de movilizaciones generan malestar e incertidumbre entre los operadores turísticos y viajeros a la hora de elegir nuestro destino, afectando a las reservas y a la imagen de Canarias en los mercados internacionales”, lamenta el presidente de Ashotel, Jorge Marichal.

Sin embargo los sindicatos reprochan a los empresarios hoteleros que, a pesar de los “excelentes” resultados del sector turístico del año pasado y también de este, reclamen la congelación salarial. “Nosotros estamos dispuestos a rebajar el salario en aquellos hoteles que efectivamente lo están pasando muy mal, pero no que se aplique de forma generalizada como quieren los empresarios”, explica Domingo Trujillo.

La manifestación de esta tarde que recorrerá la Avenida Litoral de Playa de las Américas, desde el Hotel Gran Tenerife hasta el Hotel Conquistador, es un toque de atención a la patronal con la que los sindicatos esperan que “recapacite” y ceda en sus pretensiones. De lo contrario, advierten, el conflicto podría desembocar en paros como los anunciados en Baleares, donde habrá huelga el próximo 20 de julio, o en Las Palmas, Málaga y Alicante.