Un medio económico ha hecho un amplio muestreo entre presidentes y altos directivos de empresas españolas acerca de la crisis y la pronta recuperación económica. Entre los entrevistados figuran conocidos personajes de nuestra industria, todos ellos responsables de importantes empresas del sector. Con sus respuestas sobre la situación que vive el país y los posibles brotes verdes que se atisban, los presidentes y altos directivos del Sector se han retratado uno a uno.
Así, consejeros delegados como Gabriel Escarrer, Carmen Riu, Antonio Catalán y Josep Piqué han hecho unos análisis reales del duro momento que vive España y de su devenir a corto plazo y que para ellos no son tan boyantes como pintan algunos, en especial las autoridades. Por su lado, los presidentes de Iberia y NH han sido más políticos que sus colegas, más complacientes y han abordado el tema con menos rigor analítico. Nada que ver con las opiniones vertidas por los citados.
Hidalgo pasaba por allí, por la consulta, y ha aprovechado para hablar de Air Europa, de lo bien que va, del buen año que va a tener, “de los números negros”, y no ha abordado el meollo de la cuestión, aunque se ha limitado a pedir más financiación para las empresas. El presidente de Globalia ha hablado de lo suyo -es cierto que Air Europa se ha recuperado de forma considerable: la crisis de Iberia le está dando mucho oxígeno- mientras que sus colegas han hecho una reflexión global.
Riu, Escarrer, Piqué y Catalán coinciden en un punto: en que se tiene que hacer en profundidad la reforma de las administraciones del Estado. El gasto público es la asignatura pendiente del Gobierno de Rajoy y lo cierto es que esta reforma no se atisba en el horizonte. Todos ellos se muestran contentos con la marcha del turismo pero en el análisis general tienen sus dudas acerca de la recuperación por, entre otros factores, el alto grado de desempleo que hay en nuestro país.
Las reflexiones de Antonio Vázquez y de Federico González nada tienen que ver con las de sus compañeros. Mientras unos -los citados anteriormente- hablan de paro, de reformas pendientes, de duplicidades de organismos públicos, etc el presidente de Iberia se circunscribe a los mensajes de optimismo que se están transmitiendo y “que tendrán sus incidencias en los viajes” y el de NH hace una declaración tan política que raya en la mentecatez: solo dice humo, naderías, palabras sin sentido*.
De todos los consultados, el que más rotundo, valiente y sensato ha estado es el vicepresidente y consejero delegado de Meliá Hotels International. Es el único, además, que ha entrado en profundidad en el asunto de las reformas de las administraciones públicas, denunciando las duplicidades de las instituciones e incidiendo en que ha faltado decisión en las reformas. Merece la pena leer su reflexión sobre la crisis y sobre el turismo en un contexto global**
Las declaraciones las pueden leer enteras en la edición de Expansión de este sábado. Lo que dicen cada uno es un fiel reflejo de cómo son ellos y, por ende, sus empresas.
* Federico González (NH Hoteles) El segundo semestre se presenta moderadamente optimista. Probablemente estemos hablando de un cese de la caída en el consumo y de registrar ligeros crecimientos en algunos meses concretos, siempre y cuando los numerosos factores externos que condicionan la demanda no perjudiquen su evolución.
Las razones que nos llevan a considerar este mejor comportamiento para final de ejercicio son, por un lado, que la contracción experimentada en los últimos años se ha estabilizado en el sector turístico a lo largo de los seis primeros meses de 2013 y, por otro, que la demanda recurrente se muestra más activa y de forma más continuada. Además, en el segundo semestre del pasado año se acentuó la caída, lo que favorecerá una comparativa interanual más positiva para ese periodo en este año.
El necesario saneamiento que el sector privado ha venido llevando a cabo, su reinvención con el foco puesto en maximizar el retorno de los recursos aspirando a la rentabilidad y a la creación de una oferta más competitiva y de mayor calidad, junto a las medidas de estímulo que faciliten la inyección de liquidez en los mercados, propiciará un contexto más optimista de cara a la generación de mayor actividad comercial, con mayor atractivo a la inversión y que permitirá una recuperación más sólida y sostenible de cara al futuro.
** Gabriel Escarrer (Meliá) En 2013 dejaremos de estar formalmente en recesión, y nuestra competitividad –si se analiza la balanza exterior– estaría mejorando, pero no se puede hablar de recuperación económica en España hasta que confluyan tres factores: crecimiento económico, flujo de crédito a las empresas, y creación de empleo. No veremos confluir estos factores en 2013, pues, pese a las dolorosas pero necesarias medidas de austeridad y a la reciente propuesta de racionalización administrativa, el ritmo y el calado de las reformas no es todavía el que los empresarios esperábamos para volver a ser competitivos: hablo de un excesivo número de ayuntamientos, diputaciones, consejos insulares, empresas públicas, infraestructuras ruinosas (como aeropuertos que deberían cerrarse) o subvenciones improductivas.
En el turismo, y en los sectores que dependen del deprimido consumo nacional, necesitamos reformas estructurales para garantizar las prioridades del Estado del bienestar, ofreciendo viabilidad a empresas e inversores, y sostenibilidad al modelo productivo. Un modelo que destina casi el 20% del PIB a pagar intereses y principal de su deuda pública no es sostenible.
Se ha evitado el rescate, pero ha faltado decisión y ritmo en las reformas, actuando casi exclusivamente por la vía de los ingresos, y esto ha perjudicado al consumo y a la supervivencia de muchas empresas, y no habrá recuperación real hasta que se tomen medidas para aliviar la presión fiscal y se afronte valientemente la reforma dela Administración.
Hay una cosa clara...bajando los sueldos, aumentando impuestos para personas y pymes no se aumenta el consumo interno...quitar duplicidades se debió de hacer ya hace 5 años, por no hablar de que los cargos de las empresas publicas como paradores y demás no deberían ser nombrados por el muy español método del dedismus maximus...hace falta regenerar un sector cuyas decisiones las toman gente demasiado veterana, con mucha experiencia pero escasa imaginación...en todo hoteleras, aerolineas, aavv y ttoo...hace falta una implicación directa a nivel local, provincial, autonómico y estatal...un desarrollo sostenible de verdad no las milongas que cuentan los politicuchos y empresarios sin escrúpulos (vease la playa virgen de Tarifa, el hotel del cabo de gata o mas recientemente el trapicheo chungo de la CAM con la estación de Navacerrada); hace falta flexibilizar y facilitar la cracion de empresas y mas en el sector turistico, hace falta que lo responsables del expolio del estado (vease los bancos) suelten de una vez la pasta, pero lo mas importante es la confianza y no la de los bancos o mercados, si no de los que tienen el mando en confiar en la gente joven aunque no tengan experiencia cosa que no pasa...pero bueno "this is Is-Pain" ¿a que esperamos?