Venezuela debe al grupo Air France-KLM unos 290 millones de euros y esta deuda va a lastrar las cuentas de este ejercicio hasta tal punto que este factor, sumado a la sobrecapacidad de algunas rutas de largo radio y la bajada del transporte de mercancías, ha llevado al holding a recortar sus previsiones de Ebitda de 2.500 a “entre 2.200 y 2.300 millones de euros”.
Las estimaciones pesimistas se han hecho públicas poco más de dos semanas antes de que Air France-KLM revele sus resultados semestrales. Entre enero y junio su número de pasajeros creció un 2’5%, hasta los 37’8 millones, pero el transporte de mercancías se desplomó un 4’3%, según recogen varios medios.
Air France-KLM, como Iberia, mantienen su litigio con el Gobierno de Venezuela por los impagos acumulados. La socia de IAG rechazó la propuesta de pago del Ejecutivo presidido por Nicolás Maduro y aún espera el pago de los 200 millones de euros que le debe. Pero la otra aerolínea española afectada, Air Europa, del grupo Globalia, sí ha asumido que el Estado venezolano le pague en seis cuotas semestrales y con quitas variables de alrededor del 20%.
En 2003, Venezuela impuso la obligación a las aerolíneas de vender los billetes en la moneda local, el bolívar, comprometiéndose a cambiarla después en dólares. No obstante, el gabinete de Maduro está incumpliendo este compromiso y negociando descuentos ante la falta de reservas de divisa extranjera en el país.
Un tema donde se nota la experiencia de Sánchez Prieto para que no afectara nada a Iberia. Un gran gestor con resultados demostrados
Todavía no han entendido que no es lo mismo negociar con AENA que con Venezuela.