Aire para Wamos: prevé un gran ahorro con el receptivo operado por Globalia

Wamos Group empieza a tener noticias alentadoras de cara a recortar gastos y aumentar ingresos. El conglomerado de Springwater calcula un importante ahorro en los costes de su receptivo en el Caribe con la operación que desde marzo corresponderá a Welcome, como ya adelantó en exclusiva preferente.com.

El equipo de Martin Gruschka habla de cientos de miles de euros que dejarán de gastar por la diferencia de precio respecto a lo que les viene cobrando Gowaii. La división que dirige Emilio Rivas ha hecho una oferta muy agresiva y gracias a ello ha conseguido llevarse la parte importante de un contrato cuyo cliente aporta unos 70 mil pasajeros al año.

El gran negocio para Globalia vendrá especialmente con las excursiones contratadas en destino, más que por los meros traslados. Como es sabido, los tours que contratan los turistas directamente tienen un margen altísimo. Parte del crecimiento fulgurante del grupo de Javier Díaz ha obedecido precisamente a los ingresos generados por esta actividad.

Gowaii se ha apoyado en sus inicios especialmente en Pullmantur y Royal Caribbean, así como en el mercado ruso, también hoy en acusado declive. La postura de Royal Caribbean se antoja así decisiva en el devenir del grupo de Javier Díaz y en el desenlace de su disputa con Springwater.

Desde la firma de Martin Gruschka creen que la amenaza de denuncia del dueño de Gowaii se fundamenta en la postura de debilidad en la que quedará al perder este jugoso contrato, y se muestran convencidos de que no llegará a presentarla y de que se trata de una mera estrategia para presionar, intimidar y tratar de quedarse con todo el grupo con un desembolso mínimo.

De hecho, a los oídos del presidente de Springwater han llegado las palabras en las que los cercanos a Díaz aseguran que en pocos días están entrando en Campo de las Naciones. Este martes, entretanto, el dueño de Gowaii esparcía una nota en la que decía que a él no le habían informado oficialmente de que le retiraban el receptivo, y que él no había prestado “consentimiento” (sic) a que su cliente quisiera finalizar su relación con él.

Algunos medios, cuyo compromiso con la verdad quedó ante todos en clara evidencia especialmente durante las crisis de Orizonia y Transhotel, anteponiendo siempre su beneficio a costa del interés general, se hicieron eco de esta comunicación y siguieron en su tónica de escribir al dictado de las empresas, obviando cualquier esfuerzo de cerciorarse del rigor de lo que dice una fuente que no aporta prueba alguna y que es parte interesada y por tanto subjetiva.

Javier Díaz, en su última aparición pública con motivo de la presentación de su cadena hotelera, había declarado que su próximo paso era montar una compañía aérea. En su equipo más cercano se aseguró a este medio que se enteraron de esta pretensión por primera vez a través de la prensa.