Ha fallecido en Palma uno de los empresarios más exquisitos del turismo mallorquín, Pedro Cerdá, fundador de la agencia Europalia y de la cadena hotelera Palia Hoteles, tras una larga, dura y penosa enfermedad. Este martes se celebra un funeral en su memoria en la capital balear.
Cerdá fue socio en la agencia de Lorenzo Palmer, Andrés Femenías y Jaime Massot (éste también fallecido), un cuarteto que innovó el mundo de los viajes a mediados de los ochenta con nuevos nichos de mercados.
Con el tiempo, Cerdá se alió con Palmer—los dos socios más elitistas-- y juntos pusieron en marcha la hotelera Palia, con establecimientos en distintas zonas del país, para luego retirarse y seguir disfrutando de la vida.
Porque Pedro Cerdá era un bon vivant, una persona muy alegre, amante de la música moderna—Bruce Springsteen era su icono—y de ideas progresistas pese a haberse procreado en una familia palmesana muy conservadora.
Ha muerto a los 64 años y, en el tiempo que padeció el fatídico cáncer, nunca perdió una sonrisa que era una de sus señas de identidad. Disfrutó de los placeres de la vida y fue amigo de los amigos en un mundo de traiciones.
Adiós! AMIGO.