Vueling cerrará este mes de octubre su base en el aeropuerto de Bruselas-Zaventem como parte de su reestructuración tras el caos de julio que le ha llevado también a clausurar las de Palermo y Catania (Vueling recorta en Italia: cierra las bases de Palermo y Catania).
La aerolínea dejará de tener un avión basado en Bélgica lo que implicará cancelar las conexiones con Lisboa y Oporto, si bien los enlaces con España se mantendrán, aunque con nuevos horarios, según detalla Expansión.
El objetivo de Vueling es concentrar su operativa (aviones y tripulación) en los aeropuertos principales y así ser capaz de reaccionar más rápidamente si se producen incidencias. Se trata de volver a sus orígenes de combinar buen precio y buen servicio. “Ya era la filosofía de siempre, que se ha degradado por motivos externos e internos”.
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