La muerte de los 30 británicos fallecidos en el atentado perpetrado en junio de 2015 contra un hotel de Túnez fue un homicidio, según un juez británico, que eximió este martes al establecimiento, de la cadena mallorquina Riu, y a las agencias de turismo de cualquier negligencia en el suceso.
El magistrado Nicholas Loraine-Smith, del Tribunal Superior de Londres, rechazó que las compañías de turismo o el hotel actuasen con negligencia al no proteger a los turistas. Durante seis semanas, la Justicia británica examinó las circunstancias del ataque perpetrado en la playa del hotel Riu Imperial Marhaba, en la localidad de Port El Kantaoui, próxima a Susa, por el radical islámico identificado como Saifeddine Rezgui.
No obstante, las familias de los fallecidos en el atentado terrorista de la playa de Sousse, en Túnez, culpan a Tui de negligencia y anuncian que, tras una investigación que culminó esta semana, demandarán al mayorista. La empresa dice que no podía hacer nada porque la seguridad en los hoteles no es de su responsabilidad.
En el muy especial sistema judicial británico, acabó ayer una vista judicial en la que se determinó lo obvio, que las víctimas de los atentados de Túnez fuera “asesinados ilegalmente”. El juez rechazó que tanto el hotel como el tour operador –en la mayor parte de los casos, era Tui, antes Thomson– tuvieran responsabilidad. Pero el asunto en esta fase simplemente clarificaba qué ocurrió y ahora irá a más si ahora las familias presentan la demanda como han anunciado formalmente.
La investigación fue especialmente crítica con la actuación de la policía tunecina, de la que dice que su actuación fue “en el mejor de casos incomprensible, en el peor, cobarde”. Los policías, cuando vieron al terrorista en la playa disparando a diestro y siniestro, se marcharon en busca de armas adecuadas, con las que regresaron casi una hora después del inicio de la matanza, y después de que el joven entrara incluso en el hall de hotel, disparando a todos lo que encontraba y que eran turistas.
Kylie Hutchison, abogada de 22 de las familias, dijo que “en nombre de nuestros clientes, que perdieron a sus familiares en el atentado, ahora prepararemos una demanda contra Tui”. El mayorista, por su parte, dice que no tenía responsabilidad alguna sobre la seguridad en el hotel o en la playa y que, en consecuencia, es un error acusarlos de “desidia grave”.
Las familias sostienen que cuando compraron sus vacaciones preguntaron a Thomson si eran seguras, dado que las mismas tenían lugar meses después de otro atentado contra un museo en la capital, Túnez. Afirman que Tui les confirmó que eran vacaciones seguras. La investigación concluida ayer también determinó que Tui no hizo ninguna comprobación de seguridad, pero el tour operador rechaza las acusaciones que, ahora, con toda probabilidad, entrarán en un nuevo proceso judicial.
Nunca es responsabilidad ni el tour operador ni el hotel.
Un terrorista caminando por la playa.Caso asi puede también
pasar en UK