La lucha cruel, por el corto y medio radio en Europa, ha dejado vencedores. Si se analiza el panorama sin apasionamiento, Ryanair es, por el momento, la vencedora de esta batalla aérea. Hay otras compañías que están en la pelea, pero en condiciones distintas, como el caso de Easyjet, Vueling, Wizz Air, Norwegian.
Otras, han preferido la larga distancia, o largo radio, en una huida a mercados en teoría más seguros, pero inciertos. La lucha será feroz también como lo ha sido durante estos años en la corta con pocos ganadores y muchos perdedores. ¿Alguna lección habrá que aprender? No parece este el caso: vamos a cambiar de escenario geográfico y hemos comenzado una lucha de la que nadie tiene seguridad de ganar. Nos trasladamos al "Eldorado", América, tanto del Norte como del Sur.
Con los precios por los suelos cuando todos sabemos que son insostenibles, por muy LLLC, que se quiera hacer. Norwegian tiene tantos frentes abiertos, que yo por lo menos a nivel personal ya no se ni dónde no vuelan. Algún trasnochado me dirá que uno no entiende el negocio que es cosa ahora de los 'millennials', la generación del Milenio.
En fin, digan lo que digan, el negocio no ha cambiado; han cambiado las personas; se recortarán costes en detrimento del cliente final. Yo, en el largo radio, tengo mis dudas.
Mientras tanto en Sudamérica intentan imitar el modelo americano, como Southwest, o el europeo como Ryanair. Copa lanza su línea de bajo coste, México, Volaris, o VivaColombia, y así un largo número de jugadores dónde al final quedaran solo unos pocos. Deben pasar por esta fase como lo hemos hecho en Europa. Todos conocemos a los vencedores y en algunos países hispanoparlantes deberán ponerse las pilas si no quieren perder el tren de la oportunidad o ser ahogados por la competencial cruel.
Espero que los que dirigen todas estas compañías aéreas recuerden la frase de Marco Tulio Cicerón: "La vida de los muertos perdura en lamemoria de los vivos". Aunque yo en la aviación no he visto que sus directivos la recuerden cuando ven desaparecer o morir a las compañías aéreas que estaban a su alrededor hace algún tiempo.
Como siempre Tomás. Excelente articulo. Un abrazo.