El honor de los Riu

La detención de Luis Riu Güell en Estados Unidos, basada, al parecer, porque uno de sus ejecutivos mandó un confuso ‘email’ a una autoridad urbanística de cuestión debía aprobar una remodelación en un establecimiento RIU, ha generado todo tipo de comentarios al respecto.

Hasta ahí todo normal. El copropietario de la cadena española, una vez citado, se subió a un avión y se presentó ante el juez de referencia, declaró y fue dejado en libertad tras depositar una fianza de 12.000 euros. Hasta aquí todo normal. Es a partir de un hecho realmente sospechoso –decretar la busca y captura internacional de un ciudadano extranjero para luego dejarle en libertad por esa cantidad– lo que llama la atención. Es la justicia USA, de la que tenemos muchas referencias por noticias, noticiarios y películas, tan particular que ni siquiera nos permite una aproximación objetiva al respecto.

Lo que realmente llama la atención es lo ocurrido aquí. España. El país de los Rius Güell. Sin que todavía, que se conozca, haya sido procesado siquiera (mucho menos condenado) se les ha sacado la piel a tiras, básicamente en las llamadas redes sociales, y han embarrado y ensuciado la imagen de unos empresarios/profesionales del turismo que llevan tres cuartos de siglo dedicándose con gran destreza y ventaja al negocio que nos ocupa.

En su comunicado remitido a todos los medios de comunicación han dado razón y la cara al respecto. Ya se debía imaginar Luis Riu la que le iba a caer cuando recibió la citación del juez de Miami Dade. ¡Así es la vida!

Me ha gustado la salida a la palestra para defender a un colega, sí, pero también a un competidor de Gabriel Escarrer (consejero delegado de Meliá Hotels Internacional) quien ha destacado el hecho cierto y descriptible del ancestro de los Riu en el negocio hotelero después de tantos años haciendo patria y camino. Curiosamente, han sido los medios de comunicación de su tierra natal los que han hecho escarnio del empresario que acaba de echar el gran órdago en España con la compra del edifico España en la plaza madrileña de ídem. ¡Así es la vida!

No voy a entrar si los ‘emails’ remitidos a la autoridad urbanística de Miami están sacados de contexto o manipulados. Tendrá que ser la justicia de aquel país libre (según dicen) la que decida esas cuestiones que son de vida y muerte para el empresario español. En principio, si el delito fuera tan manifiesto y tan grave supongo que su señoría hubiera fijado una fianza mucho más fuerte porque a Luis Riu se le suponen posibles.

Posiblemente, si en un plazo breve (la justicia en USA no es tan lenta como aquí) el juez decide archivar el caso y las denuncias ¿qué hacemos con las calumnias, injurias y mentiras vertidas a propósito de la honorabilidad de los Riu? Pues, ajo y agua. Como siempre en estos casos.

Ya se sabe, que el honor es patrimonio del alma y el alma no es de ningún juez.

LO DEL IMSERSO

La directora general del Imserso ha dicho que está revolucionando el sistema de gestión del programa Imserso. Me lo creo porque conozco a Carmen Balfagón y es mujer que no se para en barras. Lo que promete lo suele cumplir. Llueva o escampe.

Ya escribí en una ocasión reciente que el programa Imserso hay que potenciarlo, extenderlo y ampliarlo. Distribuirlo en base a criterios objetivos para que se aproveche cuanto más mejor. Será difícil llevar a la realidad cualquiera de esas premisas si los señores diputados no se dignan aprobar los Presupuestos Generales del Estado. No parece que estén precisamente por esa labor.

¡La leche!