Las empresas turísticas buscan nuevas vías legales para no tener que reabsorber a los trabajadores una vez se levante el estado de alarma. Como va venido publicando Preferente, en las últimas semanas se ha producido en el sector una oleada de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por causa de fuerza mayor (El sector turístico se convierte en un inmenso ERTE).
La mayoría han sido aprobados con gran rapidez por la autoridad laboral, lo que ha supuesto un gran alivio para los empresarios. Sin embargo, el gran inconveniente de los mismos es que únicamente tendrán vigencia hasta la finalización del estado de alarma, en vigor hasta el 12 de abril (con posibilidad de ser prorrogado) (Todos los ERTEs terminarán de golpe con el fin del estado de alarma).
Según han revelado los expertos que han participado en una jornada de trabajo organizada por PwC y Hosbec, las empresas turísticas, conscientes de que tardarán meses en superar la crisis, han comenzado a tramitar nuevos ERTE por baja productividad. Su pretensión es aplicarlos en el momento que concluya el estado de alarma, evitando con ello recincorporar de golpe a las decenas de miles de trabajadores afectados.
La limitación de los ERTE por fuerza mayor se queda corta
Desde PwC argumentan que la limitación de los ERTE por fuerza mayor a la duración del estado de alarma hace que "el plazo se quede corto". Y es que todos los expertos asumen que el turismo será uno de los sectores que más tardará en recuperarse. Por lo tanto, ven inviable que una vez se levanten las restricciones vuelva el nivel de producción registrado antes del estallido de la crisis sanitaria.
El problema de los ERTE por baja productividad es que su tramitación es más compleja que los de causa de fuerza mayor. Además, el plazo para obtener respuesta de la autoridad laboral es mayor. Por este motivo, PwC recomienda que se empiecen a tramitar lo antes posible.
Es previsible que que el día 1 postcrisis sanitaria no se ponga todo dios a viajar de nuevo, probablemente no habrá dinero y también estarán arrancando empresas de todos los sectores con lo que la gente tendrá que trabajar, como mucho una caña y a casa... Eso en España, pero creo que aplica a todo el mundo, resida donde resida.
PWc está muy liado. Antes de arreglar a todo el mundo tendrá que arreglar la situación de los trabajadores de In destination Incoming Ex Thomas Cook.
A estas alturas no han recibido el certificado de deuda para acudir al FOGASA.Recordar que el Ere se firmó el 5 de diciembre 2019