Las agencias de viajes minoristas españolas afrontan un escenario especialmente adverso para sobrevivir, ya que los costes de personal y de alquileres les representan en algunos casos más del 70 del negocio, lo que supone una dificultad añadida para volver a abrir la persiana una vez se normalice la situación provocada por el brote de coronavirus.
Asimismo, los expertos también alertan de que estas agencias físicas deberán subsistir de las ventas de reservas en hoteles de playa nacionales, que es la parte del negocio que menos valor añadido aporta puesto que el cliente tiene más tentación de hacer este tipo de compra por Internet.
Las agencias de calle estaban logrando generar el grueso de sus ingresos con viajes más sofisticados y lejanos, como los circuitos fuera de España, para los que se vislumbra un parón de venta de cara a los próximos meses, en contraste con los viajes internos para los cuales no se necesita avión.
Las agencias han reclamado al Gobierno planes específicos para mantener su actividad, aunque también si respuesta alguna como está ocurriendo con el resto de sectores económicos, que auguran que la actual falta de medidas se traducirá en que España sea el país acabe siendo el que registre una crisis más profunda, del mismo modo que ya está siendo el de más muertos del mundo por millón de habitante.
Tus opiniones guardatelas para ti. Ya está bien de restregar los muertos, están haciendo lo que pueden y hay que reconocer que los planteamientos que están haciendo en la Unión Europea son aceptados por otros miembros, de eso no dices nada. Informar está muy bien pero opinar si conocimieno no es lo mejor. Todos tenemos que remar juntos y no estar continuamente con los reproches.