La Comisión Europea presentará esta semana a los países miembros un documento absolutamente en favor del turismo, titulado “Europa necesita un descanso”, que se orienta a poner orden en el caos interno actual, en el que cada país adopta las decisiones que mejor le parecen, e intentar recuperar la movilidad lo antes posible.
La Comisión parece tener claro el problema actual de la movilidad y está decidida a suprimir las restricciones dentro de Europa –probablemente también incluyendo Gran Bretaña–, pero aplicando límites para países de fuera, los cuales han de ser iguales en todo el continente. Como si fuera una Europa unida y no una banda de países, que es lo que está ocurriendo hoy. Eso no implica incumplir las medidas de seguridad que existan, pero sí que no sea un caos. ¿Por qué un ciudadano que lleva un mes en cuarentena en un país ha de estar otros quince días si entra en el país vecino, por ejemplo?
El plan de la Comisión reconoce que “el turismo está en un grave problema”, y que seis millones y medio de empleos corren peligro de perderse, con efectos demoledores para todos. Por lo que hay que buscar ya caminos para salir de esta situación, poniendo orden en las fronteras interiores para intentar salvar el mercado único interior, del que hoy ya nadie se acuerda.
La Comisión no tiene más remedio que admitir que el proyecto europeo está hoy congelado. Los países no han hecho más que saltarse todo lo que habían venido firmando, haciendo cada uno su política, incluso fastidiándose con los suministros de material médico de primera necesidad, en contra de las normas en vigor.
El director general de WizzAir, que quería volver a volar lo antes posible, dejó claro el problema, al decir que su aerolínea, que tiene base en Hungría y opera sobre todo en Europa, llega a 42 países y que no hay dos que tengan las mismas normas, quejándose de que así no se puede hacer nada.
Este caos existe porque no se base a salud si no a desesiones políticos!? Cuantos"expertos"tanto opiniones y prácticas reducirlas!?