La autoridad de la competencia británica anunció este viernes que Virgin Holidays, el operador vinculado a la aerolínea y propiedad del magnate Richard Branson, debe devolver el dinero de los viajes cancelados durante los meses de la pandemia y que, en caso de negarse, presentará una demanda ante los tribunales de Justicia. La compañía, que hasta ahora se negaba a ello, anunció que reembolsará el dinero de todos los viajes cancelados antes de septiembre antes del 30 de octubre y que para el 20 de noviembre habrá pagado aquellas cancelaciones que hayan tenido lugar en este mismo mes de octubre.
Virgin tenía 53 mil pedidos de reembolso por viajes desde marzo, por un importe de 203 millones. La autoridad de mercados y competencia (comparable con la Comisión del Mercado en España) dijo que tiene cientos de quejas de gente que no había recibido los reembolsos.
Virgin Holidays es una rama del imperio de Branson, que vende viajes. Por supuesto, comercializa viajes en la compañía aérea filial, pero también vendía viajes para otros destinos, desvinculados de su proveedor del grupo. Las quejas de los clientes habían venido publicándose en los medios de comunicación. La autoridad de la competencia arguye que la ley establece que la compañía tiene 14 días para llevar a cabo las devoluciones.
La autoridad de la competencia también se pronunció contra Sykes Cottages y Vacation Rentals, dos organizaciones mucho más pequeñas, que tampoco devolvían lo pagado por alojarse en sus establecimientos. Las dos fueron también amenazadas con los tribunales.
Deberían tomar nota en el resto de Europa...