Las grandes aerolíneas, que hasta ahora habían considerado a la clase turista lejos de la prioridad que daban a la business, están teniendo que acometer un viraje de su estrategia ante los elevados costes que soporta atraer al viajero más pudiente.
Entre estos costes asociados a la seducción del cliente de la business se incluyen desde las salas de espera de primera clase hasta las redes creadas en torno a los múltiples vuelos diarios entre centros de negocios (El mayor hotelero mundial augura que los viajes de trabajo volverán a máximos).
Estos costes más altos, según Expansión, se pueden sostener cuando hay viajeros de negocios ya que las tarifas suelen ser mucho más altas, pero las aerolíneas están teniendo que recurrir a recortar estos gastos y por lo tanto centrarse en la clase turista, la única donde ahora hay algo de demanda (Iberia lanza una ofensiva para recuperar a los viajeros corporativos).
Por ejemplo, United anunció que ampliará su servicio a más de 40 playas caribeñas y mexicanas este mes, que se suman al aumento de vuelos a Florida. American Airlines ha incorporado 33 nuevas rutas desde junio, y dos nuevos destinos en México. En el caso de Southwest, añadir vuelos a Palm Springs, California y Miami “nos dará acceso a ingresos adicionales en un momento crítico”, explica Gary Kelly, su CEO (Las agencias corporativas se preparan para la era Covid-19).
No s normal lo de las aerolineas</b. No es bonito.