El mercado emisor británico, atado de pies y manos por las restricciones adoptadas para frenar la expansión del coronavirus, experimentará una intensa reactivación una vez mejore la situación epidemiológica (Aviso a Boris Johnson: “Las agencias no pueden permitirse perder otro verano”).
En su intervención en la jornada organizada por Turespaña, el director de la Oficina Española de Turismo (OET) de Londres, Javier Piñanes, ha señalado que "dentro de este panorama tan oscuro hay signos positivos que dan esperanza". "La gente tiene muchas ganas de viajar y está dispuesta a hacerlo cuanto antes", a lo que se añade "la apertura de nuevas rutas por parte de aerolíneas y turoperadores" de cara a la temporada estival.
Aunque reconoce que resulta "muy difícil hacer pronósticos", afirma que hay "altísimas probabilidades de que el flujo turístico vaya a nuestro país" ya que se mantiene como la opción preferida en este mercado emisor. Incluso se atreve a decir que, siempre y cuando "las circunstancias sean mínimamente favorables", los turistas británicos "saldrán en tromba" hacia España, lo que podría hacer que "la recuperación sea más rápida de lo que algunos vaticinan".
Piñanes revela que los planes de los grandes grupos turísticos con presencia en Reino Unido, como es el caso de Tui, Jet2 y Easyjet, es reiniciar operaciones a mediados o finales de marzo, por lo que "a lo mejor podría haber un pequeño movimiento en Semana Santa". Si bien prevé que la reactivación más vigorosa de la demanda no empezará hasta "abril y mayo", pronosticando "un fuerte incremento de reservas para el verano".
Pese a ello, cree que lo más probable es que haya que esperar a 2023 o 2024 "para alcanzar las cifras de 2019". Además, advierte que si España y sus destinos "no controlan la pandemia y nos consideran un país de alto riesgo, será muy difícil que estos movimientos se produzcan".
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo