Nunca antes prácticamente todas las aerolíneas low cost de Europa se habían volcado masivamente a competir por los vuelos interiores de un país como lo que va a ocurrir en Italia a partir de este verano cuando, previsiblemente, se normalice la situación de los viajes y el turismo.
Ya puede Alitalia olvidar los vuelos nacionales que no tiene nada que hacer, aunque sí le quedarán los de largo radio para los cuales su único competidor directo, Norwegian, se ha retirado.
Italia, como nunca ningún otro país, ni siquiera Alemania, ni por supuesto Gran Bretaña, verá la competencia feroz de todas las compañías low cost. Allí está, por supuesto Ryanair, que además se expande para defender su liderazgo; allí está Easyjet que, si bien no es la más competitiva, tiene el segmento de más nivel de las low cost y, probablemente, tal como está Italia, será la única en ofrecer un servicio de cierto nivel; está Volotea, con su producto tan especial, de aeropuertos secundarios a aeropuertos secundarios; está Vueling, que tendrá que dar la talla muy seriamente, y encima ahora aterriza WizzAir, la segunda compañía con los costes más bajos de Europa. Y, además, hay bastantes operadores locales como Blue Air, como Neos –parte del grupo turístico Alpitour--, Albastar o incluso la búlgara Tayaran o la griega Lumiwings.
Ocurrió algo parecido en Viena, pero no era una red nacional sino un aeropuerto, donde en un momento dado confluyeron la mayor parte de los operadores, causando parte de las enormes pérdidas de Eurowings, por ejemplo, o poniendo a Austrian en un brete.
La dimensión de esta guerra se muestra en que en cualquier ruta hay varios operadores, todos con precios ajustadísimos, buscando expulsar a los rivales como es elemental. Para la mayor parte de estas compañías, Italia puede ser una sangría; para las mejores, desde luego, no será una mina de oro durante un tiempo.
Digno de ser observado con atención, especialmente desde España, donde nos hemos librado de algo así.
... por ahora... Ya veremos cuando en determinados aeropuertos pasemos a tener rutas monopilizadas por IB-AE cuyos precios no irán a la baja precisamente, si no hay pastel para esas tan denostadas.
Toda la razón del mundo
Con todo lo que habéis machacado a Alitalia en los últimos años por su gestión (que puede ser que no estuvierais desencaminados), y resulta que es el marco legislativo el que le pone los palos en las ruedas, dejándole fuera de su propio home market. Y casi rezáis para que en España no ocurra lo mismo por el bien de IB/UX.
"Cuando veas correr sangre por las calles, es tiempo de comprar propiedades." Frase del Barón de Rothschild en 1757 tras la derrota de Napoleón en Waterloo.