Una conocida consultora hizo un estudio para saber el peso de las OTA (Online Travel Agencies) en las reservas hoteleras en Europa. Su investigación, que se hizo pública en Francia, abarca todo el continente y se basa en datos de 2019, cuando la situación era normal. Y dice que el primer canal de distribución de los hoteles independientes son estas plataformas, lo que en la práctica quiere decir Booking, seguida muy de lejos por Expedia (El gran dominio de Booking que preocupa a los hoteles).
No es sólo que vendan 4 de cada 10 pernoctaciones, es que sobre otras 2 (un 18 por ciento más), son decisivas. La razón es que los viajeros usan Booking para saber a qué hotel quieren viajar y en muchas ocasiones compran por otros canales que no el de la propia plataforma. Es decir que la presencia online en estas plataformas supondría el 58 por ciento de las ventas, dos tercios de las cuales directamente a través de ellas, un tercio por otras vías.
Entre esas “otras vías” están sobre todo las ventas no comisionadas, tramitadas directamente ante el hotel, lo cual es muy importante para el establecimiento.
La reacción ante este dominio apabullante de las OTA es diverso. En general se busca prescindir de ellas, aunque muchos empresarios prefieren ver como una oportunidad para avanzar en otros aspectos. Tal vez el principal problema no sean las OTA, dicen algunos empresarios, sino que entre ellas hay una situación de casi dominio completo del mercado. Lo que es evidente es que la existencia de una plataforma multilingüe de la calidad que tiene Booking es fundamental para poder operar en varios mercados a la vez. Con el visitante internacional no hay otro camino. Y para un establecimiento pequeño, menos.
El fracaso de las asociaciones hoteleras!