La primera OTA del mundo, Booking, ha recuperado la normalidad financiera, tras el fuerte impacto del Covid. Lo ha conseguido en 2021, cuando la mayor parte del mundo turístico tenía serios problemas para sobrevivir. Su facturación de 11 mil millones de dólares en el ejercicio fue un 61 por ciento superior a la del 2020, si bien no llegó todavía al nivel de 2019, cuando fue de 15 mil millones.
No obstante, aunque las ventas no llegaron a recuperarse del todo, los accionistas pueden estar contentos porque se volvió a las cifras de beneficios anteriores. Los 1.200 millones de beneficios distan abismalmente de los mínimos 59 millones de 2020.
Pese a la crisis, observen que Booking ha gastado nada menos que 3.800 millones de dólares en marketing, lo que indica su vocación de mantener el liderazgo del mercado. Booking dispone de una de las mejores plataformas del mundo y estas inversiones, tanto en promoción como en investigación la conducen a mantener la distancia respecto de sus competidores.
Expedia, su gran rival, aunque con un perfil diferente, presenta un cuadro de evolución similar.
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