Nautalia mira con optimismo al futuro después de dos años terribles marcados por una pandemia que se ha cebado con especial crudeza, desde el punto de vista económico, con el sector de agencias de viajes (Los datos no mienten: el sector de agencias es el más afectado por la crisis).
En declaraciones a Preferente, su director general, Rafael García Garrido, revela que “en 2022 tenemos previsto hacer break even y en 2023, la vuelta a beneficios”. Detalla que “el objetivo es llegar a cinco millones de euros, frente a los 4,1 millones de 2019”.
El directivo, con un papel crucial en el proceso de obtención de la ayuda estatal por parte de Wamos, también destaca que las pérdidas sufridas en 2021 han sido menores de lo presupuestado. “Preveíamos 13 millones y finalmente fueron siete, con lo cual hemos estado mejor de lo esperado”, resalta (Wamos: punto de inflexión tras 15 meses de espera).
Una vez estabilizada la situación tanto de la agencia como de su matriz, Nautalia ve ahora “oportunidades para ampliar la red”. “El objetivo es crecer. No tenemos una cifra definida, pero sí tenemos claro que queremos crecer. Tenemos unas posibilidades tremendas en todas las áreas de negocio de Nautalia. Es el plan que teníamos en 2019 y hacia dónde íbamos. Sufrimos un frenazo importante, pero lo vamos a retomar”, señala.
En la actualidad, Nautalia dispone de un total de 180 puntos de venta en propiedad repartidos por el territorio español, a los hay que añadir los aproximadamente 40 que posee bajo la fórmula de franquicias o asociadas.
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