El próximo 23 de septiembre, el país más aislado del mundo, Bután, volverá a abrir sus fronteras. Pero sólo para los ricos, porque al mismo tiempo introduce un impuesto turístico de 200 dólares la noche, que limitará severamente las visitas.
Es la primera vez que un país reduce de esta manera el número de visitantes, aplicando un impuesto tan elevado. Según el gobierno, el impuesto, que se denomina “tasa para el desarrollo sostenible”, destinará su recaudación a mantener un entorno privilegiado. Hasta ahora, los turistas pagaban 65 dólares por noche.
Todo en Bután es extraordinariamente inusual. Se trata de un país de una belleza inusual, de cultura budista, situado entre China e India, al que se accede de forma muy restringida, mediante el aeropuerto de Paro, de extrema dificultad y al que sólo pueden volar unos pocos pilotos.
El país lleva cerrado al mundo desde marzo de 2020, cuando se detectó el primer caso de Covid. La política radical de aislamiento ha permitido que Bután sólo registrara 60 mil infectados y 21 muertes en una población de 800 mil habitantes.
En una declaración pública, Tandi Dorji, responsable de la promoción del turismo y al tiempo ministro de Asuntos Exteriores, dijo que “el Covid nos ha permitido reformular el turismo. Hemos reestructurado el turismo y lo operamos de otra forma, con la huella de carbono más baja”.
El país promueve una político de poco volumen turístico y gran valor, o sea precio. Se trata de crear un destino exclusivo. Para ricos, en una palabra. “En el largo plazo, queremos crear experiencias de alto valor para los visitantes, pagando bien a nuestros ciudadanos y profesionales”, añadió el ministro.
No obstante, hay muchos operadores turísticos que se quejan de las consecuencias que puede tener esta política. Ha habido muchas cancelaciones de grupos que tenían reservada una plaza pero que no sabían de este nuevo impuesto. Sólo se puede entrar al país con viajes semiorganizados.
A lo peor, es un Pais que no tiene tanta agua potable (para duchas y lavar toallas, e.g), ni alimentos para compartir, ni combustibles para los rent-a-car … en definitiva, los recursos son finitos y en una economía de escala el primer orden es el doméstico.
Esto es lo que se debería hacer en Mallorca. Nos ahorraríamos toda la chusma que vienen de turistas baratos y toda la chusma que viene a hacerles las camas, servirles cubatas y limpiar todo lo que ensucian.
Lo de un gasto mínimo de 200 dólares noche, -si vas en pareja, de lo contrario la broma se acerca casi a los 300, lo llevan haciendo desde hace muchos años... y al que solo puedes llegar en avión, no se puede pasar por tierra desde India, si no eres indio, salvo que cruces al pueblo inmediato y te vayas el mismo día, solo puedes volar a Paro, logicamente con la compañía aérea nacional, que solo vuela desde BKK, SIN, DEL, a precios que no son una ganga precisamente.....,tienes que tener contratado todo de antemano, lógicamente con una agencia autorizada local, que tiene el monopolio de los precios....Si quieres pasas por el aro, y aflojas la cartera........ Y para poder hacer eso tienes que tener una economía muy saneada por la que no te importe por dos semanas, un mínimo de 4 o 5 mil euros.