La crisis de las aerolíneas está siendo tan grave que algunas proponen soluciones un tanto sorprendentes. Qantas, la primera aerolínea de Australia, ha enviado al personal un escrito pidiendo a todos los ejecutivos de la compañía, cualquiera que sea su rango, que digan si están dispuestos a trabajar de maleteros en los aeropuertos durante los próximos tres meses.
Colin Hughes, el jefe de personal, que parece ser incapaz de conseguir en la calle gente para este trabajo, ha dicho que los que comparezcan, tengan el rango que tengan en Qantas, tendrán formación y se les asignarán turnos para hacer de maleteros en los aeropuertos de Sídney y de Melbourne.
Se busca cubrir al menos cien puestos de trabajo con esta fórmula. Aunque si yo fuera Colin Hughes, después de los tres meses, y si la compañía sigue operando normalmente, me preguntaría qué trabajo hacían estos ejecutivos sin los que la compañía puede operar sin problemas.
"No tenemos planes de hacer que quienes opten por esta oferta tengan que trabajar adicionalmente en su puesto anterior", explicó el jefe de personal.
El trabajo es sencillo: escanear y separar las maletas para enviarlas a los aviones y las fases sucesivas de este trabajo.
Esta es la 'venganza' anónima de los 1.600 maleteros que Qantas despidió durante la pandemia y que ahora no consigue reemplazar acudiendo al mercado. Como es evidente, los afectados no se quedaron esperando a Qantas y ahora no retornan a su antiguo empleo, lo que tampoco habla muy bien de las condiciones.
Cría cuervos y te sacarán los ojos........ a ver si aprenden. No se si maltrataban a sus maleteros, en condiciones laborales o salariales, o ambas, pero si es así tienen lo que se merecen-
Ohhhh el karma!!!como alegra todo lo que está pasando por falta de personal
Y encima les seguirán pagando el antiguo sueldo jajjajajajaj