La captación de personal desde el sector de la construcción parece ser una de las soluciones que están encontrando los empresarios turísticos de Baleares para paliar la escasez de personal que se viene observando desde el inicio de la pandemia. (Las grandes hoteleras siguen sufriendo la falta de personal cualificado)
Tal y como informa Diario de Mallorca, las empresas están detectando un trasvase de empleados desde el sector “del ladrillo” hacia hoteles, bares y restaurantes. Los trabajadores consideran que las ofertas procedentes del turismo son más atractivas y mejoran las regulares condiciones laborales con las que cuentan en la actualidad.
Algunos portavoces de CCOO y de UGT en Baleares reconocen que trabajar en el turismo otorga retribuciones más elevadas que la construcción, y las tareas diarias requieren un menor sacrificio. Además, ven un mejor futuro, ya que, por ejemplo, el convenio balear de hostelería contempla un incremento salarial del 5% para este año, y el de la construcción es de sólo un 3% en toda España.
Este trasvase puede deberse a que, durante la pandemia, ocurrió en sentido contrario. La paralización total de los viajes hizo que los empleados migraran a otros sectores, y ahora, con la vuelta a la normalidad, estén dispuestos a regresar, aprovechando que hoteles y restauración están ofreciendo salarios competentes por la falta de mano de obra.
Toda esta situación fue analizada recientemente por uno de los grandes espadas del sector hotelero español, como es el consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer. Señaló es un asunto que “nos inquieta” y “es un problema intrínseco de muchos sectores”. No obstante, se mostró convencido en que “vamos a cubrir con crecer todas las vacantes que quedaron vacías por el Covid”.
Trabajadores bastante cualificados para el sector para seguir pagando miserias como les gusta a los jefazos.
Por mucha emigración que meta el gobierno para tirarlos al suelo, en la construcción se cobra mucho más que en el sector de turismo. Sobre todo en trabajos sin cualificación. Y hay más control de las horas extras y condiciones laborales.
En los 2000 no había quien tirara maletas en Madrid porque todo el mundo que podía se iba a poner masa y ladrillos ganando el doble o el triple.
En cuanto entre el PP en el gobierno, pepinazo a otra burbuja (bienvenida sea) de la construcción. Patadón al balón y a otra cosa. Esto es España.
Si los portavoces de CCOO y de UGT dicen que en el turismo, las retribuciones son mayores que en la construcción, es que no tienen npi, y tendría merito que pasara esto con gente que lo único que tiene que hacer es saber en que punto está cada sector, ya que ellos no trabajan en ésto y si en "defender a la clase trabajadora".
Pero nada, la fiesta de los paniaguados incompetentes, continúa