Canarias: las cuatro emergencias que preocupan e indignan a los residentes

La consejera de Turismo y Empleo del Gobierno de Canarias, Jéssica de León, aboga por la puesta en marcha de un gran pacto por el turismo en el que participen todas las fuerzas políticas, expertos, académicos y la sociedad canaria. Su pretensión es “crear un comité de expertos que fije unas directrices comunes”, “sin demagogia” (Canarias: los antiturismo se movilizan contra su principal motor económico).

De León recuerda que en solo nueve meses de legislatura han publicado el anteproyecto de Ley de Ordenación Sostenible del Uso Turístico de Viviendas y que su compromiso es seguir trabajando en la reforma del bloque normativo de la actividad turística, “con entre veinte y treinta años de antigüedad” (Canarias: 35 inspectores para controlar 54.000 viviendas vacacionales).

La consejera aspira a “recuperar el equilibrio entre el turista y el residente que nunca se debió perder, y que evitará que se acentúen procesos como la turistificación o la gentrificación”. El siguiente paso en la agenda legislativa será abordar la Ley de Ordenación de Turismo de Canarias, que data de 1995, para después regular los campings y acampadas.

Para De León, “la paciencia de la ciudadanía canaria ha colmado y es comprensible”. Remarca que “el actual Gobierno ha heredado una Canarias con cuatro emergencias: la hídrica, la energética, la habitacional y la migratoria. Y al mismo tiempo, han subido las hipotecas y el precio de la cesta de la compra”.

Sin embargo, aclara que “el turista no es el culpable de una gestión política que ha sido deficiente”, asegurando que “la mayor parte de la ciudadanía canaria reconoce el valor de una industria que ha traído las mayores cuotas de bienestar social de la historia, al representar el 40% del empleo y el 37% de la recaudación fiscal en las islas, con 3.441 millones de euros”.