Un total de siete alternativas se ha puesto encima de la mesa en los últimos años para avanzar en la ampliación de El Prat, y, hasta la fecha, todas ellas han resultado fallidas. La disputa entre Gobierno central, Aena, la Generalitat y las organizaciones ecologistas hace que la consecución de un acuerdo sea complicada, ya que siempre alguna de las partes no se muestra conforme (Ultiman nuevas alternativas para la ampliación de El Prat).
A continuación, se recogen todas las propuestas lanzadas en base a una lista elaborada por El Periódico. El objetivo de todas ellas es el crecimiento del aeropuerto en número de vuelos intercontinentales para poder competir con grandes hubs como Heathrow, Frankfurt, París-CDG o Schiphol, entre muchos otros (La ampliación de El Prat, clave para crecer a nivel intercontinental).
2021: alargar la pista más cercana al mar. Aena apostó por destinar 262 millones para realizar una extensión de 500 metros (hasta los 3.160), y que esta pista pudiera acoge vuelos intercontinentales. Para ello, habría que invadir parte La Ricarda, área protegida, por lo que los ecologistas se opusieron a este plan.
Febrero 2023: construcción de una pista en el mar. Esta iniciativa llegó por parte del ingeniero, Joaquim Coello, que defendía la fabricación de una pista de 3.400 metros conectada con el aeropuerto mediante una plataforma. De este modo, no se tocarían espacios naturales, pero, aunque irrumpió con fuerza, finalmente quedó en nada.
Julio 2023: alargar la pista paralela al mar. Barcelona Global propuso ampliar la pista corta hasta los 3.310 metros para favorecer el despegue de aeronaves de largo radio. Tampoco afectaría a la zona de La Ricarda.
Agosto 2023: ampliar la pista cruzada por encima del mar. Sólo un mes después, el exarquitecto, Josep Antoni Acebillo, planteó acortar la tercera pista para alargar la cruzada por encima del mar. Pese a que no tocaría espacios protegidos, sí afectaría a la línea de la playa de El Prat de Llobregat y Viladecans.
Septiembre 2023: desvío de vuelos a otros aeropuertos. En este momento llegó la alternativa de los ecologistas, firmemente opuestos a nuevas construcciones o ampliaciones. Estos propusieron que una parte de los vuelos low cost y de mercancías pasasen a ser operados en otros aeropuertos de Cataluña (Girona, Reus y Lérida) para que El Prat pudieses acoger vuelos intercontinentales sin sufrir bloqueos.
Octubre 2023: nueva posible ampliación de la pista cercana al mar. El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez-Llibre, retomó esta idea creando una estructura que pasase por encima del espacio protegido natural de La Ricarda. La pista alcanzaría los 3,5 kilómetros necesarios para que puedan ocuparla “todos los aviones” (El Prat, ante la última posibilidad para su ampliación).
Abril 2024: el plan desesperado de la Generalitat. Y hace apenas unos días, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, anunció su intención de construir una terminal satélite, así como un incremento de las operaciones que sobrevuelen las localidades de Gavà y Castelldefels durante las épocas de más tráfico. Como publicó Preferente, esta idea choca con Aena, y con el propio Gobierno central que la considera inviable por la contaminación acústica que provocaría en los vecinos.
Si no encuentran solución ahí, seguro en Madrid podemos con todo.
Al final LEBL se quedará en un aeropuerto regional por culpa de 4 indeseables…
Llevan anyos con el tema del aeropuerto pero de los problemas serios como el agua no se han preocupado....visca la republica independiente de catalunya.
Narnia
Lo dices con ironía,no se momento solo esa Cataluña que vitoreas ve necesaria, y quiere esa ampliacion