Rebelión de accionistas de Wizz Air por las retribuciones a sus jefes

Todos conocen la historia reciente de pérdidas de Wizz Air, que iba para segunda aerolínea low cost de Europa y ha perdido terreno en favor de Easyjet. No obstante, no toda la culpa de la situación es de sus directivos, sino que también hay una parte de mala suerte con los motores que emplean sus aviones, de la marca Pratt & Whitney (Wizz Air bate su récord con 50 aviones fuera de servicio).

Pero Jozsef Varadi ha incluido ahora un bonus de 15 millones para varios directivos de la compañía aérea, lo que ha desatado una tormenta entre los accionistas, o sea los propietarios. El bono pretende que estos ejecutivos no se marchen de la compañía antes de 2028.

Varadi aduce que si los directivos no se marchan, todo el mundo, también los accionistas, se benefician. Y los accionistas admiten que la dirección está haciendo un gran trabajo en condiciones adversas, por el problema de los motores. Pero, aunque no lo dicen, llevan muchos años sin beneficios y les gustaría poder mejorar la situación de la compañía de cara a que un día la inversión que hicieron se revalorice (Wizz Air gana dinero por primera vez desde antes de la pandemia).

Alguna de las compañías que operan bajo el paraguas de la marca (hay una en Abu Dabi, otra en Malta, la de Hungría y, finalmente, una británica) siguen teniendo problemas graves de puntualidad y de fiabilidad, aunque las cosas han mejorado respecto a hace uno y dos años.