“Las empresas de rent a car quedan en riesgo por el registro documental”

El presidente de Feneval, Juan Luis Barahona, lamenta que la entrada en vigor del Real Decreto 933/2021 el próximo 1 de diciembre pone en peligro el negocio de muchas empresas de alquiler de vehículos, ya que no cuentan con los medios suficientes para atender las exigencias de la normativa.

En una entrevista concedida a Preferente, critica que “nos repercute gravemente”, al igual que los ataques contra el turismo que se vienen sucediendo en España. En cualquier caso, confía en que la demanda se mantenga sólida, con unas previsiones de facturación de 2.250 millones de euros para este año, un 5,6% más que el año anterior.

Pregunta. ¿En qué momento de salud se encuentran las compañías de alquiler de vehículos? ¿Se ha superado ya el impacto de la pandemia?

Respuesta. Aún no hemos alcanzado los niveles prepandemia, aunque nos vamos aproximando a ellos. El mercado de la compra de vehículos estará ya normalizado para el próximo año, al igual que pasará con la propia demanda.

P. ¿Cómo ha transcurrido el verano en términos de demanda?

R. Esperábamos una temporada con más turistas, lo que podía haber sido una fantástica temporada en cuanto a alquiler de vehículos se refiere. Acabó siendo una temporada buena sin más. Los turistas que llegaban a nuestro país alquilaban menos días sus coches y eso hizo que la demanda no fuera tanta como era de prever.

P. ¿Siguen sufriendo un déficit en el número de vehículos o ya se ha conseguido paliar esta problemática?

R. Este año se ha producido un incremento de flota, ya que se han podido adquirir más vehículos porque sí se contaba con un mayor número de stock por parte de los fabricantes, algo que en años anteriores no sucedió.

P. ¿Qué opinión le merece el polémico Real Decreto 933/2021 que quiere imponer el Gobierno? ¿De qué manera les afecta?

R. Desde Feneval nos mostramos totalmente en desacuerdo con lo que se recoge en este Real Decreto, ya que pondrá en grave riesgo a gran parte de las empresas de rent-a-car, en su gran mayoría pymes al no encontrarse realmente preparadas a nivel administrativo y tecnológico para cumplir con las exigencias. La falta de una interfaz adecuada para el reporte de información hace que sus efectos pueden ser muy negativos, y, desde luego, que nos repercute gravemente.

P. El rent a car también está siendo víctima de la turismofobia, con algunas personas viéndose obligadas a retirar las pegatinas de los vehículos para no ser increpados. ¿Qué le parece toda esta situación que rodea al sector?

R. El hecho de que se señale al vehículo de alquiler como causante de problemas en áreas de alto turismo en España no es justo. El término turismofobia nos afecta negativamente como empresas alquiladoras de vehículos, pero, no solo a nosotros, sino a todo el tejido empresarial que está alrededor del turismo, un sector vital para la economía de nuestro país.

P. Algunos actores culpan a los coches de alquiler de la saturación de las carreteras en temporada alta. ¿Cuál es su respuesta al respecto?

R. Los coches de alquiler representan solo una pequeña parte del tráfico total en las zonas de mayor concentración turística. La saturación es un problema más amplio relacionado directamente con los planes de movilidad de cada ciudad o localidad. Hay que trabajar para mejorar la circulación, y las empresas alquiladoras ya lo hacen con la incorporación de tecnologías y prácticas más sostenibles para reducir el impacto del tráfico por carretera.

P. ¿Qué otras problemáticas urgentes rodean al sector del alquiler de vehículos?

R. Las empresas de alquiler de vehículos se enfrentan a un entorno normativo cada vez más complejo que afecta significativamente su operativa. Además del Real Decreto 933/2021, por ejemplo, ha introducido nuevas obligaciones que incrementan la carga administrativa. Las empresas, la regulación para la entrada de vehículos complica aún más la situación en destinos específicos como la isla de Ibiza. Estas restricciones limitan la disponibilidad de coches de alquiler y complican la logística, sobre todo en temporada alta, cuando la demanda es mucho mayor.

La futura Ley de Movilidad Sostenible es otro desafío importante, ya que promueve la reducción de emisiones y fomenta el uso de vehículos eléctricos. Para las empresas de alquiler, esto implica una adaptación rápida y costosa hacia la electrificación de sus flotas. La falta de infraestructura de recarga adecuada en muchas zonas del país es un obstáculo significativo que dificulta el proceso y pone en riesgo la viabilidad de la transición hacia una flota más sostenible.

También están las normativas locales sobre las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), que restringen el acceso a ciertos tipos de vehículos en áreas urbanas. Adaptar las flotas a estos requisitos puede requerir inversiones considerables para renovar los coches o, en su defecto, limitar la operativa en dichas zonas, lo que afecta directamente a la competitividad y la oferta de las empresas.

Finalmente, está el derecho de los ciudadanos a disponer de un vehículo de sustitución en caso de accidente, lo cual obliga a las empresas de alquiler a mantener una disponibilidad de coches suficiente para cubrir estas demandas. En un contexto donde ya existen dificultades para renovar o ampliar el parque vehicular, cumplir con esta obligación representa un reto adicional que no siempre es fácil de gestionar.

P. ¿Qué previsiones de facturación manejan de cara al conjunto del año 2024?

R. La previsión de facturación de 2.250 millones de euros para este año, con un aumento del 5,6% respecto al año anterior, refleja una recuperación gradual y positiva para el sector del alquiler de vehículos. Este crecimiento indica una mejora en la demanda y una mayor actividad en el mercado. Sin embargo, este incremento debe ser valorado con cautela, ya que las empresas siguen enfrentando desafíos importantes como los que he mencionado anteriormente y que pueden frenar el cierre de año.