Por Fernando Urrea
Madrid. 31/08/10.- De nada han servido las protestas de víctimas y afectados por el accidente del vuelo JK 5022, como de nada han servido las recomendaciones y las presiones de organismos oficiales. Telecinco sigue en sus trece de emitir la miniserie Vuelo IL 8714 en agosto, prácticamente en el trágico aniversario y horario de máxima audiencia. IL 8714. I, letra anterior a J; L, posterior a K. Los guionistas sabrán qué mensaje se oculta bajo la cifra 8714. Los guionistas saben que el asunto está en manos del juez, que no hay todavía informe técnico definitivo, que un accidente aéreo como éste puede tener varias causas: sistema de fabricación defectuoso, controles inoperantes por alguna causa, revisión negligente, decisión de despegue equivocada... Pero Telecinco se arriesga a lanzar un programa que no se sabe si esta realizado en plan reality, documental de investigación con elementos personales para escenificar el desastre o simplemente recreación virtual con añadidos de la intervención de emergencias. El caso es que ya ha llevado a plató a varios supervivientes para ir caldeando la audiencia. No se trata de censuras ni de cortar el derecho a la información y a la recreación, pero el accidente está aún muy reciente, hay todavía heridos, las familias no han podido cerrar sus heridas y hay una emisora de televisión sensacionalista que mete imágenes en las llagas. Donde más duele, o sea, dónde más morbo haya para enganchar a la gente. Bueno, ya sabe a lo que expone, pero también sabe que puede hacerle mucho daño a la aviación comercial y al turismo. Y todavía en plena temporada.
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo