El presidente de la asociación hotelera de Tenerife ha presentado la dimisión de su cargo de forma irrevocable. La marcha de José Fernando Cabrera ha sorprendido a todo el sector turístico tinerfeño ya que en el mes de noviembre estaba prevista la finalización de su mandato.
Las razones del portazo de Cabrera —de esta manera lo califican en la Isla— no están del todo claras. Lo que no admite discusión es el bombazo que supone su marcha a tan solo dos meses de la elección del nuevo presidente. JFC hacía tiempo que estaba ofuscado con autoridades regionales.
El ya expresidente de Ashotel ha alegado haber cerrado un ciclo de trabajo. Pero no ha sido muy explícito en los argumentos sobre una marcha tan precipitada, que ha dejado atónitos a los socios de la patronal hotelera, al mundo empresarial, político y a la amplia familia turística de Tenerife.
José Fernando Cabrera es un empresario que dice lo que piensa, que no se arredra ante nadie, y menos ante los dirigentes políticos de su tierra. Algunos compañeros le echan en falta un poco de cintura para ocupar un cargo cuyos vínculos con la política, directos o indirectos, son inevitables.
El empresario Jorge Marichal se perfila como sucesor del sucesor de Pedro Luis Cobiella, quien fuera principal impulsor de Ashotel. La principal actividad de Marichal es el negocio inmobiliario, aunque también es propietario de un aparthotel en el pueblo de Arona.
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