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Madrid. 20/1/11.- La Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur) se sigue desarrollando sin que en los últimos doce meses se hayan disipado las principales incertidumbres que afectan al sector. Las más de 10.500 empresas participantes se inclinan por mantener un moderado optimismo, aunque es difícil ante problemas estructurales acuciantes que la crisis económica ha dejado al descubierto, como la sobreoferta en los segmentos del transporte aéreo, las agencias de viajes y la hostelería, que han propiciado fuertes procesos de concentración empresarial.
En esta edición de Fitur, la número 31, las empresas turísticas agudizan sus estrategias. Algunas de las grandes cadenas hoteleras centrarán su esfuerzo promocional en trasladar las inversiones ejecutadas para mejorar su oferta. Es el mensaje de las dos grandes hoteleras de Benidorm y Costa Blanca, Servigroup y Magic Costa Blanca. Por otro lado, una de las grandes novedades para esta edición es que los hoteles van a vender vacaciones en plena feria al público general con descuentos medios del 15 % si se contrata la estancia durante los días del certamen.
Los organizadores son conscientes de que la industria se encuentra en un punto de inflexión. De cara al inicio de la feria, el presidente del comité ejecutivo de Ifema, Luis Eduardo Cortés, ha dicho que la participación empresarial ha crecido en esta edición un 2% respecto a 2010. Añade que el número de expositores institucionales se ha reducido debido a las restricciones de presupuesto en las Administraciones españolas. Hasta el día 23, cuando se clausure, los organizadores prevén una afluencia de 200.000 visitantes.
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