Por Tomás Cano
La señora Haydée Kuret de Rainieri manifiesta sin pudor que la compañía aérea creada por Juan José Hidalgo es un pozo sin fondo. Permítame señora que le haga las siguientes reflexiones con toda humildad.
¿No será que todos ustedes se han equivocado de socios y en especial de directivos, cuando hace estas manifestaciones?
En primer lugar no puede planear el futuro de su empresa a través del pasado, porque ninguno de sus socios o directivos han creado jamás ninguna compañía aérea. Debe usted estudiar el pasado de cada uno si quiere justificar su presente y futuro.
El futuro de Air Dominicana está oculto detrás de los hombres que lo hacen posible. ¿Tiene usted, y el resto de los inversionistas, acaso a esos hombres acostumbrados a crear empresas de aviación? Me temo que la respuesta es negativa. Si quieren de verdad crear una aerolínea, búsquelos porque existen.
Señora, el futuro es algo que cada cual alcanza a un ritmo de sesenta minutos por hora, haga lo que haga y sea quien sea.
Le podría dar algunos nombres que serían capaces de poner en marcha el proyecto de Air Dominicana y hacerlo funcionar. Para eso necesita la paciencia necesaria y el tiempo porque solo ellos hacen más que la fuerza y la violencia de sus manifestaciones.
Busque, pues, al hombre adecuado, el que es constante en el camino cierto y no solo persistente.
Air Dominicana es un proyecto que desde hace años algunos han buscado con interés personal y profesional, y no han sido capaces de encontrar. Usted y sus socios ahora lo tienen. No lo tiren por la borda, y halle entre los profesionales alguien que lidere el mismo y usted pueda sentirse satisfecha de que su inversión ha merecido la pena
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