Crucero y comercio

Por Fernando Urrea

24/5/11.- El mercado turístico emisor nacional apenas se mueve, pero aumenta considerablemente el número de españoles que contratan un crucero. Es el crucero el segmento que sube exponencialmente en Europa y en el todo el mundo por esos elementos que le hacen singular en su oferta: comodidad, diversidad de destino sin cambiar de habitación de hotel, seguridad, comunicación garantizada por una tripulación políglota, multiplicidad de alicientes de diversión, aventura, ocio, juego, compras, contactos nuevos… y todo con un precio relativamente bajo, asequible a economías medias, equiparable a cualquier viaje vacacional de similar categoría, que cuenta con el aliciente del todo incluido, salvo extras. Que es una opción atractiva se concreta en el volumen de viajeros españoles, que ha crecido un 35 por en el último año, cifra que se agranda en importancia teniendo en cuenta la situación económica. Conviene prestar mucha atención a la proyección de crucero y plantear a las autoridades europeas, estatales y autonómicas que se adelanten a los problemas y limen las dificultades que aun quedan, como puertos de atraque no considerados frontera, las instalaciones portuarias que faciliten operaciones para grandes buques y  accesos y transporte de los cruceristas, vigilancia y normativas estrictas para eliminación de residuos y aminorar la contaminación marítima, y conseguir la libertad horarios y días de apertura de la oferta comercial en los destinos para que el viajero pueda combinar excursión y compras. No conviene dejar de prestar atención a una actividad que ya supera el 13 por ciento de los turistas que llegan a España, que esta temporada puede acabar con más de ocho millones de cruceristas en los puertos españoles. Hay que tenerlo en cuenta porque el crucero está reactivando y dinamizando el transporte y el turismo en general, y porque esto va a más.