La creadora de contenido en TikTok que se hace llamar “Dra. Sabra” ha conseguido el mayor impacto de su vida en redes sociales gracias a un absurdo vídeo en el que presume de haberse negado a ceder el asiento a un joven de 13 años para que pudiese viajar con su familia.
Ha ocurrido en un vuelo de larga distancia entre Seattle y París. La protagonista, cuyos vídeos suelen conseguir unos cuantos miles de visualizaciones, lleva ya 12,9 millones. Y todo por rechazar la solicitud de una madre que quería sentarse cerca de su hijo adolescente.
@lifewithdrsab That’s a no from me dawg 🤣 would you have given up your seat? Also they ended up finding a solution so no, i am not a terrible human being. Also the child was like 13.
♬ original sound - Sunshynelove21
Dra. Sabra pregunta a los usuarios de la red social que habrían hecho ellos en su lugar. Además, afirma que “terminaron encontrando una solución, así que no, no soy un ser humano terrible”. “Además el niño tenía como 13”, señala.
En su opinión, los padres del menor deberían haber planificado y organizado su viaje con mayor anticipación para no haber tenido problemas. También defiende que se puede ser amable y simpático sin tener que sacrificar su experiencia y comodidad por satisfacer a terceras personas.
Personalmente no aguanto las narcisistas Tiktokeros o influencers de Instagram etc., pero creo que en este caso la Dra. Sabra tiene razón. Los padres que utilizan a sus hijos como moneda de cambio para hacer sentir culpables a sus compañeros de vuelo se están convirtiendo en la norma en casi todos los vuelos de este verano. Seguro que la hija se alegró de no tener que sentarse junto a su "madre helicóptero". O quizá la madre tomó como rehén a otro pasajero y le arrancó un asiento para su hija.
Algunos asientos "se pagan", es decir, tienen un suplemento adicional, por tanto, no entiendo que haya que cederlos a nadie. Efectivamente, esta familia tendría que haber comprado asientos contiguos si querían ir juntos y no perjudicar al prójimo. Mucho jeta es lo que hay.
A mi en una ocasión me pidieron que cambiara un asiento en un vuelo de doce horas por otro asiento en un asiento del medio y dije no. Lo siento mucho, si he pagado por ir en ventana o pasillo no lo voy a cambiar por uno del medio que son los peores para un vuelo largo y que además tienes que estar pidiendo permiso cada vez que quieres moverte. Todos queremos bueno, bonito y barato, pero todo tiene un límite. Y por cierto, no me vanaglorio en redes sociales ni otras sandeces.
Yo pagué un extra por un asiento al lado de la salida de emergencia y la aerolínea cambio el avión dos días antes por lo que perdí esa reserva y me pusieron dónde les dio la gana , el año pasado me hicieron lo mismo , en ambos casos viaje de 9 horas y ni un "lo sentimos" siquiera, en 15 días regreso a casa y me supongo que dos días antes me vuelvan a cambiar el asiento ( Iberia cobra 80€ extras por ese asiento). No cedan su asiento ya lo hará la aerolínea, bye.