Los profesionales vinculados al mundo del turismo, así como la sociedad española en general, han mostrado una solidaridad digna de elogio durante los meses más duros de la crisis sanitaria. Paolo Casula es uno de los miles de profesionales que han aprovechado el parón laboral para ponerse al servicio de los más necesitados.
Este cocinero del Ayre Hoteles Gran Vía de Barcelona se unió al proyecto de voluntariado Comer Contigo. El proyecto, al que se han sumado muchos chefs de la ciudad condal, ha permitido alimentar a las personas más vulnerables. Palladium Hotel Group agradece públicamente el gesto de su empleado.
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