La historia se las trae. Es una broma que no causa gracia alguna. Los hechos sucedieron en el control de seguridad del aeropuerto de París-Orly, y la protagonista es una mujer, española, agente de viajes, que viajaba a Madrid.
Al pasar por el control de seguridad, los guardias le dijeron que debía de abrir la maleta porque en el escáner habían visto una pistola. La mujer, que contó la historia en Onda Cero, como es lógico, se puso nerviosa. La cuestión es especialmente delicada porque Francia lleva una historia de atentados terroristas que convierte esta situación en bastante embarazosa.
Ella, por supuesto, dijo a los agentes que no era posible, que si acaso no era algo suyo. En ese momento la cachearon y siguieron los controles, en medio de la tensión. A los 15 minutos, según explica, los guardias se echaron a reír y le dijeron que todo era una broma. No se pueden imaginar la reacción más enfadada que tuvo nuestra compatriota ante este tipo de humor.
Una vez en España, la mujer ha presentado una protesta en el ministerio de Exteriores y estudia ver si puede presentar una denuncia de más alcance. La mujer es agente de viajes y es natural de Pontevedra.
lo preocupante no es la broma (es la su versión) si no su historial de atentados terroristas.