A priori, una hamburguesa debe ser un plato sencillo, delicioso y al alcance de todos los bolsillos. Sin embargo, el chef Robbert Jan De Veen, propietario del restaurante De Daltons, ubicado en Voorthuizen (Países Bajos), se propuso revolucionar este concepto con el objetivo de batir todos los récords y hacer de su restaurante un atractivo turístico.
Jan De Veen ha elaborado La Golden Boy, una burger que, según el libro Guinness de los Récords, es la más cara del mundo, valorada en 5.000 dólares (4.250 euros). Tiene un tiempo de cocinado de alrededor de nueve horas.
De un primer vistazo, cuenta con ingredientes realmente exquisitos, pero que aparentemente no deberían inflar tanto el precio: trufa blanca, caviar Beluga, queso Cheddar de Wyke Farms, Whisky de Macallan Rare Cask, carne de vacuno wagyu A5, cangrejo de Alaska, salsa barbacoa elaborada con café Kopy Luwarl, mayonesa de huevo de pato, paleta ibérica española, aros de cebolla rebozados en Panko japonés.
Lo curioso es que el sablazo no está en el interior, si no en el ingrediente más barato, el pan. Está elaborado con champán Dom Pérignon y bañado por láminas de oro, una técnica se está volviendo muy viral en la hostelería para batir este tipo de récords.
Me parece una absoluta vulgaridad.
Porque no te la puedes permitir y tienes pelusilla…
Sabes tú si me la puedo permitir o no? Me parece una vulgaridad mezclar alimentos sin sentido, por muy caros que sean para hacer una hamburguesa, que tiene de hamburguesa solamente el nombre.
Eres un muerto de hambre…aunque te cueste reconocerlo
Rafa, eres sencillamente vulgar.
Yo le añadiría una botella de vino bañada en oro, -si existe, una bodega de Rioja Alaves sin más lo vende a más de 10.000 € la botella, así puede batir un record para snobs que no saben en que gastar todo el dinero que tienen aunque sea lo más hortera que existe. Y además le ponemos una copa Swarossky, por ejemplo, con pie de oro y rubíes de no sé cuantos miles de de euros y lo pone a precios por encima de cinco cerosy así todos contentos.