Corría el mes de abril de 1994 cuando salió a la luz que el Grupo Viajes Iberia (GVI) había contratado a José Duato, hasta ese momento consejero delegado de Marsans, y Preferente lo avanzaba en su número de mayo de ese año.
El vicepresidente de GVI, José Linares, ni siquiera estaba enterado del fichaje, puesto que fue el propio Miguel Fluxá, presidente de grupo, quien pagó una buena cantidad de millones de pesetas para hacerse con los servicios de Duato, según comentaban algunos de su allegados en aquel momento.
Uno de los motivos por el que se contrató a Duato, cuya marcha no fue muy bien recibida por parte de la cúpula de Marsans, fue para reflotar Iberojet.
Otro que tal baila! Todo un cerebro de ida y vuelta (a/desde globalia) ¡qué casualidad! Todos los empleados de Orizonia lo recuerdan con cariño (¡ja!). Y los de globalia...