Los propietarios del restaurante Monkey Bar, en Dallas (Estados Unidos), se han llevado el chasco de sus vidas. Todo sucedió hace cuestión de días. La jornada transcurría con normalidad hasta que entró por la puerta el mismísimo Paul David Hewson, del grupo musical U2 (conocido por su nombre artístico Bono).
Los dueños del local, como no podía ser de otra manera, aprovecharon el momento. Se fotografiaron con la supuesta estrella de la música, a quien invitaron a comer, y posteriormente subieron la imagen con el invitado de lujo a las redes sociales.
Junto a la foto pusieron el texto: “Nunca sabes con quién te encontrarás en el Monkey Bar. Esperamos que hayas disfrutado de tu tiempo Bono”.
Y justamente ahí se torció la historia. Los fans de Bono se percataron rápidamente del engaño. Se trataba de un simple imitador que aprovechó su parecido para comer por la cara. La situación se ha vuelto viral, con un sinfín de comentarios en los que se bromea o se denuncia lo ocurrido.
No se parece ni en los tebeos