Una anciana de unos 80 años ha provocado un importante retraso en un vuelo de la aerolínea China Southern. El avión debía viajar este martes de Shanghái a Cantón, pero el despegue sufrió una importante demora debido a que la pasajera arrojó nueve monedas en una de las turbinas. Buscaba buena suerte como los que tiran efectivo a un pozo, pero acabó detenida por ello, según recoge La Vanguardia.
El avión, un gigante Airbus 380 con 150 pasajeros, salió cinco horas más tarde de lo previsto. Por fortuna, uno de los turistas del vuelo percibió el gesto de la anciana y pudo alertar a la tripulación. Corrían el riesgo de que alguna moneda estropeara el motor y generara problemas mayores en el vuelo.
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