Agencias: dos enormes amenazas y dos posibles reinvenciones

Las agencias afrontan una doble y potente amenaza de cara a la esperada recuperación, pero también tienen ante sí dos opciones de reinventarse ante el nuevo escenario.

Las minoristas mantienen esperanzas de que sus negocios repunten con la recuperación turística que se da por sentada con las primeras vacunas contra el coronavirus en las próximas semanas, aunque sin obviar los motivos para el pesimismo (Efecto vacuna: euforia en las búsquedas de viajes en España).

Las dos grandes amenazas que deben encarar las agencias son que por un lado el mercado de compradores de viajes se va a ver reducido ante la enorme crisis económica, y por otro que en estos meses la sociedad ha dado varios saltos en su digitalización.

Las fuertes estrecheces económicas que padecen un sector creciente de la sociedad va a implicar que sus pocos ingresos se destinen a necesidades más básicas en lugar de a viajar, con lo que el mercado del emisor español se verá contraído varios años al menos.

Además, desde marzo y a causa de los confinamientos domiciliarios y las restricciones a la movilidad y sociabilidad, la ciudadanía se ha visto obligada a utilizar con más énfasis las tecnologías digitales para sus quehaceres más cotidianos, lo que a priori favorecerá a las online.

Estos dos condicionantes, unido a que en cierta medida también los viajes donde el agente cobra un mayor valor añadido como son los más lejanos parece que tardarán más en recuperarse, es lo que lleva a los expertos a plantear que puedan desaparecer alrededor de 2.000 agencias en España sobre una planta de unas 8.000, con una pérdida de entre el 20 y el 25 por ciento del sector.

Pero también los mayores conocedores de la industria relatan a Preferente las posibles salidas que tienen los agentes de viajes para reinventarse y adaptarse mejor al nuevo escenario, que pasa por convertirse en 'free lance' y por ampliar su mercado mezclando vacacional con corporativo (Meliá: hoteles “convertidos” en oficinas y nuevo producto de larga estancia).

El modelo de agentes o consultores 'free lance' está ampliamente implantado desde hace años en Estados Unidos, y supone una manera para las minoristas de ahorrarse costes estructurales de un local, sin perder del todo a sus clientes habituales.

Además, el auge del teletrabajo y las videollamadas está acentuado la tendencia conocida como 'bleisure' o 'workation', con un híbrido entre ocio y negocio, que puede permitir a las agencias más centradas en el vacacional en ofrecer un modelo compatible con ampliar su cuota de clientes corporativos (Iberostar innova y se lanza a transformar habitaciones para el ‘workation’).

La esperanza en esta coyuntura es que por encima de todo la demanda por viajar se ha acentuado, y lo que ha cambiado es la forma, en cuanto a preferencias de producto o días de estancia, y en la mano de los agentes está la readaptación a este nuevo escenario, con modelos de negocio más sostenibles y con una ampliación de su oferta comercial.