La presión turística sobre el gobierno británico, tanto de las empresas como de los ciudadanos, es muy potente. Hay dos mecanismos que probablemente se vayan a aflojar en los próximos días (Gran movilización en Reino Unido contra el semáforo Covid).
Hoy, jueves, se revisará la adscripción de los países al sistema de semáforos. Apenas doce territorios, ninguno de los cuales es de interés turístico, está hoy en la lista verde; Europa entera, con el Mediterráneo incluido, está en la lista ámbar, y finalmente otros países como Sudamérica entera, están en la lista roja. Viajar a los países verdes es cómodo; los de ámbar pueden ser visitados pero con muchos problemas al regresar –cuarentena y dos o tres PCR--, mientras que los de la lista roja obligan a un encierro hotelero carísimo (El coste para España del semáforo Covid de UK: 500 millones a la semana).
Hoy se espera que haya al menos dos destinos turísticos masivos que entren en la lista verde: Malta y Baleares. Esto es lo que se ha venido filtrando. Esto significaría que desde este lunes, los ingleses podrían viajar y no tener graves complicaciones a su regreso. Cuando decimos británicos, decimos todos, vacunados o no vacunados.
Existe una segunda mejora en las condiciones de viaje que se aplicaría sólo a quienes tengan las dos vacunas, con dos semanas de antigüedad en el caso de la segunda dosis. El Gobierno ha admitido que en estos casos, que hoy abarcan al sesenta por ciento de la población del país, pero no a los jóvenes, se podría viajar sin problemas a partir del 19 de junio, exhibiendo el certificado digital de vacunación. En realidad, lo que se decide es que se puede retornar, porque salir depende de España que, obviamente, admitirá estas visitas.
Así, pues, para finales de julio, la normalización sería muy importante en las vacaciones de los ingleses, pero desde este lunes, sólo Baleares –si se confirma esta información no oficial-- se vería beneficiada.
La presión es tan potente que no les hacen caso.
Z Portugalii już uciekali