Las agencias de viajes de Baleares hacen un balance muy positivo del año 2023, con un nivel de ventas que se ha acercado, e incluso superado al de antes de la pandemia. (Futuro prometedor para las agencias pese a las amenazas vigentes)
En declaraciones a Preferente, el presidente de Aviba, Pedro Fiol, apunta que la evolución ha sido desigual en el receptivo y en el emisor. En el primero, “sabíamos que, a pesar de algún frenazo, las cosas iban a ir bien”, pero el segundo si se ha visto más golpeado por la inflación y la pérdida de poder adquisitivo de las familias.
No obstante, celebra que “la conjunción de una buena temporada turística, unido a que todavía existen muchas ganas por viajar, ha hecho que finalmente, podamos decir que las emisoras han conseguido superar las cifras de negocio del año pasado”.
El directivo reconoce que “hemos notado los incrementos de precios”, pero destaca que el verano ha sido muy bueno y ha impulsado el volumen de ventas de todo el año. Asimismo, se ha conseguido recuperar el gasto medio de los turistas internacionales, que, aunque fue bajo al principio del periodo estival, finalmente “se pudieron recuperar cifras parecidas a otras temporadas”. (El precio de los billetes de avión es “un auténtico escándalo”)
Con todo ello, confía en que el año 2024 permita continuar la buena línea de recuperación vista durante el pasado ejercicio. “Si no hay ningún contratiempo, será una buena temporada para las receptivas y las emisoras, que conseguirán, al menos, igualar la producción de este año”.
Concluye con el deseo de que lleguen “periodos de estabilidad más largos para poder trabajar en nuestros negocios sin tanto temor y tanto cambio repentino”. “La pandemia nos ha agotado a todos y, aunque parezca que ya quedó atrás, el sector no olvida y aún se siente cansado de todo aquello que vivimos”.
Precios solo al alcance de los extranjeros. Los españoles podemos olvidarnos de las vacaciones en nuestras islas. Esta gente procede del primer mundo y tiene capacidad económica que aquí nunca tendremos. Entiendo a los hoteleros, si los extranjeros les llenan los hoteles a precios de oro pues maravilloso.