La normalización del turismo en Italia tras la pandemia va muy lenta por muchos motivos, entre ellos el caos en la expedición de pasaportes que en los años 22 y 23 supusieron la cancelación de 167 mil viajes, según cifras estimadas. Los turoperadores y las agencias no cesan en su quejido que, no obstante, no consigue efectos (Ryanair, en guerra con el Gobierno de Italia: “Son populistas”).
En algunas ciudades italianas no se puede conseguir cita para obtener el pasaporte, como es el caso de Bolonia, Milán, Génova, Pordenone, Potenza o Turín; en Venecia se tardan diez meses, en Bolzano ocho, en Cagliari, siete.
Giuseppe Ciminnisi, presidente de los agentes de viajes, afirma que “se está violando el derecho constitucional a la movilidad y se discrimina a los ciudadanos en función de su lugar de residencia”, porque los retrasos varían en función del distrito. Hace dos años que Italia arrastra este problema, sin ser capaz de poner orden.
Este caos ha generado un negocio de intermediación que muy frecuentemente deriva en estafas. El presidente de los turoperadores, Franco Gattinoni, dijo que “estamos orgullosos de tener el pasaporte más fuerte del mundo (porque permite la entrada en muchos países sin visa), pero es una pena que tenerlo sea una quimera debido al tiempo que requiere concertar una simple cita”.
El Gobierno creó una solución, Polis, para las ciudades de menos de 15 mil habitantes, pero que tampoco está dando resultados.
País de tercera
Está equivocado, el.pasaporte mejor del mundo es el de España.
No es cierto. Ambos pasaportes ocupan el 3° lugar en el ranking internacional.
Es increíble se queda uno sin palabras en la TV italiana hacen ver a los ciudadanos que viven en el paraíso y realmente viven en el tercer mundo de Europa del sur nada funciona nada. Y nadie te da respuesta de nada es un sistema obsoleto totalmente fallito que vergüenza de lugar.