Fernando Conte, presidente de Orizonia asegura en una entrevista a Expansión que no habrá más cierres traumáticos como los de Viajes Marsans (en 2010) y Spanair: "No va a haber más colapsos, pero sí un goteo de empresas que se fusionan; el proceso de racionalización va a continuar".
Sobre una salida a bolsa de Orizonia, Conte opina que "ojalá, los mercados tienen atractivo para este tipo de compañías cuyo accionista es el capital riesgo. En estas circunstancias económicas, no es el momento, pero cuando mejore se planteará entre otras opciones".
"La necesidad de desplazarse sigue existiendo pero los clientes cada vez toman sus decisiones más cerca de la fecha del viaje y, por este motivo, la visibilidad en estos negocios no es muy alta", apunta Conte en la citada entrevista con la cabecera económica de Unidad Editorial.
El presidente de Orizonia y también de Exceltur se muestra crítico con la tasa turística, ya que "la fiscalidad sobre el sector debe reducirse porque perjudica el negocio; el precio es muy importante para el turista y dos o tres euros marcan la diferencia".
Conte también rechaza las ayudas que reciben aerolíneas de bajo coste como la irlandesa Ryanair. "El modelo de subvenciones es malo, producen desequilibrios y distorsionan el mercado cuando los destinos debe ser atractivos per se", advierte. "Una cosa es que las infraestructuras reduzcan sus costes y sean más eficientes, y otra que haya subvenciones ad hoc", agrega.
Sobre las empresas en dificultades, el prescíndete de Orizonia asegura que "las compañías que están en esa situación tiene que hacer algo para ganar más cuota de mercado, obtener mejores márgenes y ajustar sus costes. Para ser rentable, la decisión no puede ser sólo despedir. Ésta debe ser una medida in extremis, ya que el capital humano es fundamental para conseguir resultados", matiza.
Sobre la última frase del Presidente de Orizonia, a ver si se lo hace llegar y toma nota el Presidente de Globalia y los secuaces que lo mal aconsejan:
Para ser rentable, la decisión no puede ser sólo despedir. Ésta debe ser una medida in extremis, ya que el capital humano es fundamental para conseguir resultados”, matiza.
Pués haber si se lo hace mirar bien este SR. y aplicarse sus propias palabras. Ellos ya han empezado a despedir, pero no en la dirección correcta. Quizás algún directivo debería ser despedido por no escuchar a sus empleados cuando estos le dicen que se están equivocando en algunas de sus decisiones, y a la postre se demuestra que lo que dice el empleado es correcto y lo que hace el directivo está mal, pero siempre paga los platos rotos los mismos, los de a pie