El rent a car espera un boom de la demanda a partir de Semana Santa

Las vacaciones de Semana Santa serán el punto de partida de la reactivación del sector de alquiler de vehículos. En un desayuno con periodistas, el presidente de Feneval, Juan Luis Barahona, ha anunciado que esperan recuperar el 80% de las cifras precrisis durante este año, volviendo a los datos de 2019 a lo largo de 2023, teniendo en cuenta que la crisis sanitaria está remitiendo. (El sector rent a car, a un 50% de las cifras prepandemia)

Pese a este optimismo inicial, el presidente ha alertado de la previsible escasez de vehículos para dar respuesta a la demanda. "Vamos a tener que empezar a alquilar sin coches", porque "tenemos problemas para que los fabricantes nos proporcionen coches nuevos". Por ello, el sector "está multiplicando las conversaciones" con estos para garantizar vehículos a todos los usuarios. (Canarias y Baleares se quedan sin coches de alquiler)

Esperan tener unos 540.000 coches para la atención de los turistas, aunque no se atreve a realizar unas previsiones sobre cómo evolucionará la compra de vehículos. Su intención es alcanzar "alrededor de 600.000 vehículos" durante este año, lo que aún supondría unos 230.000 menos que en el periodo previo a la pandemia, pero "veremos hasta dónde podemos llegar".

En este contexto, recomienda a los clientes anticiparse y reservar su vehículo "desde ya". Con ello, pretenden tener la capacidad de prever los posibles picos de demanda para la Semana Santa y la temporada de verano, además de permitir al usuario asegurar su coche bajo las mejores condiciones posibles.

De igual manera, durante el encuentro, Barahona ha vuelto a realizar un llamamiento sobre la rebaja del IVA al 10%. "El 85% de nuestra actividad está relacionada con el turismo, y pedimos tener el mismo IVA". No obstante, "aunque hemos intentado hablar con el gobierno, no lo estamos consiguiendo".

Sobre el posible impacto del conflicto de Ucrania, todavía se muestra cauto sobre las consecuencias que puede acarrear. "No sabemos el impacto que puede tener", aunque señala que no será tan grave, porque "los rusos representan el 1,5% de los turistas que llegan a España. Esta misma incertidumbre se muesta con el precio del combustible y otros costes derivados del conflicto.