La Federación Empresarial de Asociaciones Territoriales de Agencias de Viajes Españolas (Fetave) ha alertado sobre las gravísimas consecuencias que tendrá el anunciado impuesto a los billetes aéreos, entre las que se encuentran la pérdida de competitividad, la caída del turismo y la disminución de la cohesión territorial, entre otras.
Fetave afirma que no es un impuesto verde porque “su recaudación se dirige única y exclusivamente a incrementar los ingresos del Estado para financiar las actividades generales”, traduciéndose en una “pérdida de competitividad del sector turístico español en lo referente a captar turismo del exterior en momentos muy delicados de la actividad, al tiempo que restringirá el turismo interno, especialmente hacia las comunidades y ciudades no peninsulares”.
Igualmente, afirma que este impuesto será un incremento de la carga fiscal “sobre las capas medias de la sociedad”, además de “gravar a un sector que realiza su actividad, y los viajeros sus desplazamientos, sin coste para el Estado”, sin olvidar que la recaudación “puede que no compense las pérdidas de ingresos por IVA, IRPF y Sociedades”, lo que tendrá graves repercusiones sobre la actividad y el empleo (Los billetes de avión podrían subir hasta 18 euros con el nuevo ‘impuesto verde’).
Pero no es todo, ya que “que aumentará el carácter periférico de los territorios extra peninsulares y disminuirá la cohesión territorial, haciendo más periférica a España dentro de la Unión Europea y reduciendo la capacidad de los aeropuertos españoles como hub competitivos y muy especialmente del de Madrid Barajas”.
Fetave considera que existen medidas más efectivas para la “descarbonización de la economía, sin nuevas cargas fiscales”, pero, por encima de todo, más allá de cualquier argumento, el momento actual con las enormes incógnitas abiertas por el efecto del coronavirus sobre la actividad económica y financiera no sólo en España sino en el mundo, hace que la iniciativa anunciada sea cualquier otra cosa menos oportuna en el tiempo.
Todo el día llorando por los beneficios..
Cada uno mira por sus intereses, ¿el interés general?, bueno, siempre que no deje de beneficiarme a mi, bale, si no, la cosa ya cambia. Un poco de lloro,por si cuela, ahora muchas lágrmas de cocodrilo, por el coronavirus, luego será por otra cosa.